Ashwagandha es un suplemento herbario natural muy popular que se usa para mejorar la salud mental y física. Sin embargo, hay algunas personas que no pueden tomar Ashwagandha debido a ciertos factores. Yo mismo tuve una experiencia con esto hace unos años. Cuando me diagnosticaron con una enfermedad autoinmune, mi médico recomendó que tome Ashwagandha como parte de mi tratamiento.
Desafortunadamente, descubrí que no era una buena idea para mí, ya que me provocaba efectos secundarios graves. Por lo tanto, me gustaría compartir mi experiencia y hablar sobre quiénes no pueden tomar Ashwagandha.
Ashwagandha: ¿Quiénes deben evitar tomarla?
La hierba Ashwagandha es una hierba medicinal ayurvédica ampliamente utilizada para promover la salud y la longevidad. Aunque es generalmente seguro para la mayoría de las personas, existen algunas circunstancias que requieren una mayor precaución.
Embarazo
La ingesta de Ashwagandha durante el embarazo no se recomienda. Algunos estudios sugieren que la hierba puede tener un efecto tóxico sobre el feto y puede aumentar el riesgo de aborto. Se recomienda que las mujeres embarazadas eviten tomar Ashwagandha.
Lactancia
Las madres lactantes también deben evitar el uso de Ashwagandha. Los estudios sugieren que sus componentes activos se excretan en la leche materna y pueden tener efectos secundarios en los bebés.
Personas con enfermedades autoinmunes
Las personas con enfermedades autoinmunes deben tener mucho cuidado al tomar Ashwagandha. Los estudios han demostrado que puede empeorar los síntomas de enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide, el lupus y la esclerosis múltiple.
Personas con trastornos del estado de ánimo
Las personas con trastornos del estado de ánimo, como la depresión o la ansiedad, también deben evitar tomar Ashwagandha. Los estudios han mostrado que puede empeorar los síntomas y puede desencadenar episodios de ansiedad y depresión.
Personas con trastornos tiroideos
Las personas con trastornos tiroideos, como la tiroides hiperactiva, deben tener precaución al tomar Ashwagandha. Se ha demostrado que puede afectar el funcionamiento de la tiroides y desencadenar síntomas como fatiga, aumento de peso y sequedad de la piel.
Mi madre sufre de artritis reumatoide y siempre ha evitado tomar Ashwagandha. Ella es muy consciente de los riesgos para su salud y sabe que la hierba puede empeorar sus síntomas. Una vez le pregunté por qué nunca la tomaba, y me dijo que no quería correr el riesgo de sufrir efectos secundarios debido a su condición. Me di cuenta de lo importante que es ser consciente de los riesgos y estar informado acerca de los productos que toma.
Ashwagandha no se debe tomar por personas embarazadas, lactantes, ni menores de 18 años.
Efectos secundarios de la ashwagandha
Los efectos secundarios de la ashwagandha son generalmente leves y poco comunes. Algunos de los efectos secundarios más comunes son náuseas, diarrea, dolor de cabeza, mareos, insomnio y estreñimiento. Algunas personas también pueden experimentar aumento de los niveles de colesterol, aumento de la presión arterial, alteraciones en los niveles de glucosa en sangre, aumento de los niveles de ácido úrico y alteraciones en los niveles de hormonas tiroideas.
Se ha informado que algunas personas pueden experimentar reacciones alérgicas a la ashwagandha, incluidas erupciones cutáneas, urticaria, picazón y dificultad para respirar. Si experimenta cualquiera de estos efectos secundarios, debe buscar atención médica inmediata.
Tomar Ashwagandha durante un tiempo seguido
Tomar Ashwagandha durante un tiempo seguido puede ser beneficioso para la salud en general. Esta hierba ayuda a reducir el estrés y la ansiedad, mejorar la memoria, mejorar la energía y la resistencia, y también ayuda a mejorar la resistencia a la insulina. También puede ayudar a mejorar el sistema inmunológico, reducir la inflamación y mejorar la salud del corazón.
Para obtener los mejores resultados, se recomienda tomar Ashwagandha durante al menos 3 meses. Puede tomarse en cápsulas o en polvo, dependiendo de la preferencia. Debe tomarse con alimentos y con suficiente agua para ayudar a la absorción de los nutrientes. Si presenta alguna reacción adversa al tomar Ashwagandha, debe suspender su uso y consultar a su médico.
Tomar la ashwagandha. Cuándo es bueno
Tomar la ashwagandha puede ser beneficioso para el cuerpo y la mente. Esta hierba ayuda a reducir el estrés y ansiedad, mejora el sueño y la memoria, mejora la función inmune, aumenta la energía y ayuda a reducir el colesterol. También se ha demostrado que ayuda a mejorar la función cerebral, la resistencia física y la salud general.
Es importante tomar la cantidad adecuada de ashwagandha para obtener los beneficios deseados. Se recomienda tomar 500-1000 mg al día para los adultos, y para los niños se recomiendan dosis más bajas. La ashwagandha puede tomarse como un suplemento en forma de cápsulas o extracto líquido, o puede ser consumida en forma de té o polvo.
La ashwagandha es segura para la mayoría de las personas cuando se toma de manera adecuada. Sin embargo, los efectos secundarios pueden incluir somnolencia, náuseas, dolor de estómago y diarrea. Asegúrate de consultar con tu médico antes de tomarla para asegurarte que el medicamento no interfiera con los medicamentos o tratamientos existentes.
Tomar ashwagandha en la noche
Ashwagandha es una hierba ayurvédica muy conocida y ampliamente usada con el fin de mejorar la salud y el bienestar. Se ha demostrado que tomar ashwagandha en la noche puede mejorar la calidad del sueño, reducir el estrés y la ansiedad, aliviar los síntomas de la depresión y mejorar la función cognitiva.
También se ha demostrado que puede ayudar a mejorar la resistencia al ejercicio, el rendimiento deportivo y la masa muscular. Algunos estudios incluso han sugerido que tomar ashwagandha en la noche puede ayudar a reducir los niveles de colesterol y los niveles de glucosa en la sangre.
